Pocos días, pocas horas y, aun con las protestas y manifestaciones en contra, Brasil comienza a abrir los brazos para recibir a los invitados a la fiesta más grande del mundo (no lo podemos negar): el fútbol.  

Es cierto que no iremos a la Copa como selección, pero tenemos la fiesta aquí al lado, a cuatro horas de avión y a pocos miles de kilómetros de distancia. Somos los vecinos del gran tonazo del fútbol y, con todo, algo de festivo nos salpicará en estas semanas.

La ocasión es precisa entonces para recurrir a la estrecha relación entre el cine y la cultura futbolística del pentacampeón. Dado el carácter simbólico que tiene para Brasil ser sede de esta copa (el evento de convocatoria internacional más importante después de la última visita del Papa Francisco) es oportuna una retrospectiva a aquellas producciones que nos aproximan a la cultura brasileña, atravesada por el fútbol y viceversa.

Más de 200 películas se han realizado con temáticas aproximadas y/o cuyo centro ha sido el deporte rey. Sin embargo, apelando a nuestra poca capacidad de obtenerlas en el mercado peruano, citaré algunas que podemos conseguir, incluso, en el Pasaje 18 de Polvos Azules (a solo 3 solcitos y subtituladas):

El matrimonio de Romeo y Julieta (2005). Premio del público en el X Festival de Cine de Lima ¿Te suena el título? Pues sí, esta película es una adaptación de la obra de Shakespeare al mundo del fútbol brasileño e inserta la historia de los eternos amantes entre dos hinchadas paulistas enemigas al tuétano: corinthianos y palmeirenses. Una comedia que nos muestra el fervor de ambos bandos y cómo el amor puede subsistir en medio del absurdo, nada menos que de la mano de Bruno Barreto (aquel que dirigiera a la espectacular Sonia Braga en “Doña Flor y sus dos maridos”, allá por los inicios de los ochentas).


El año en que mis padres salieron de vacaciones (2006). El mundial de México 70 está llegando y los padres de Mauro, perseguidos por la dictadura, lo dejan en manos del abuelo judío en el barrio de Bom Retiro en São Paulo, sin saber que otra será la historia que les tocará vivir en torno a las experiencias de su hijo y el sueño de ser como Pelé, el astro de la Copa. La película de Cao Hamburguer nos ilustra sobre cómo la coexistencia entre grupos migratorios le dio identidad al fútbol brasileño en São Paulo. Presten atención a las imágenes originales del partido que Perú ganaba por 2 a 0 y que Brasil remontó en 4 a 2.


Era una vez en Rio (2008). Esta película de Breno Silveira, si bien no usa la temática del fútbol como eje central, parte de la tragedia que arrastra el fútbol en las favelas, y cómo los caza talentos van en busca de los futuros cracks, para insertarnos en la historia de amor dos jóvenes diferentes socialmente, pero que viven tan cerca en aquellas ironías del desarrollo urbano de Rio de Janeiro. Un film de muchas emociones encontradas, pero que nos muestra la realidad carioca más allá de un cuento apasionado.


Heleno. El príncipe maldito (2012). Rodrigo Santoro da vida a Heleno de Freitas, el famoso jugador del Botafogo de los años 40. Bajo la dirección de José Henrique Fonseca, este film nos introduce, como pocos, en la vida del jugador, como sujeto, a partir de la desgracia que lo postra en un sanatorio. Heleno, despojado de sus capacidades, solo vive para el recuerdo de gloria, sin olvidar sus excesos y su mayor frustración: la cancelación de la Copa por la Segunda Guerra Mundial.


Dejo el final para un corto metraje que disputó el Oscar en su categoría en 1999 y que constituye un referente en la historia del cine brasileño y el fútbol:  

Una historia de fútbol (1998), de Paulo Machline, narra a través de la ficción la infancia del astro más importante del fútbol brasileño, Pelé. Con simpática simpleza, y con la voz del genial Antonio Fagundes, nos adentramos en una historia tan propia de cualquier niño que aprendió a jugar, amar y temer, al fútbol de barrio. Una poesía a la esencia del balompié y a los sueños infantiles. Emoción que se vive desde la tribuna más precaria hasta la más moderna. Mira el corto completo aquí:

Seleccionar cinco películas que aludan precisamente al penta es un tanto ambicioso, pero reitero que está limitada a la posibilidad de obtenerlas con subtítulos en el mercado limeño. Ahora bien, ya entrado en el clima del Mundial, si quieres evitarte la espantosa narración de nuestros comentaristas y prefieres ver el mundial en vivo desde otro canal de cable y, aun mejor en portugués, te invito a que revises el preciso Diccionario Field de expresiones y términos futboleros en portugués brasileño, con su traducción al español y al inglés. Una herramienta de gran utilidad para los colegas del periodismo deportivo, a quienes la emoción no los debe llevar a subestimar el idioma de Pelé.