¿Compraste tu pasaje para Brasil? ¿Tomaste foto a tus boletos y lo subiste a Instagram? ¿Tienes listo el hotel y el tour? ¡Oh, wait! ¿No sabes portugués? Si estás pensando que es un “español mal hablado” y solo necesitas hablar terminando todo en “iño”, “iña”, “ao”, estás equivocado. Si subestimas el portugués no estás muy lejos de pasar ciertos papelones.  

El brasileño promedio, ciertamente, vive de espaldas a América Latina en lo que a lengua española se refiere, aun cuando el ex presidente Lula promoviera la enseñanza del castellano en las escuelas públicas. Por el contrario, el inglés ocupa la preferencia en las lenguas extranjeras en la mayoría de jóvenes.

Pero, a su vez, el portugués no deja de adquirir una particular importancia en las relaciones internacionales con la quinta economía del planeta, como también para quienes desean ingresar a su mercado. Hace poco, el famoso diario español “El País” inauguró su edición en portugués con una espléndida editorial que destacaba la hermandad ancestral e ineludible entre el portugués y el español, desde la Península Ibérica hasta la inmensa Latinoamérica.

Por eso, si vas para Brasil, es importante que sepas, al menos, algunos detalles sobre el idioma de Jorge Amado y evitar el incómodo “portuñol” que te puede traer más de una situación incómoda. Lo primero que debes saber es que existen más de 100 palabras que en portugués y español se escriben o pronuncian igual o similar, pero que tienen significados totalmente opuestos. Se les llama “falsos amigos”. 

Aquí 10 casos que, aplicados a un intenso viaje de turismo, pueden ser útiles:

1.  “Mais grande do mundo”

En algún momento debió ocurrírsele a alguien inventar esta expresión que quería aludir a su inmensidad territorial y hoy se repite insistentemente en cuanto mencionamos Brasil o vemos imitaciones en “portugués”. Pues bien, esta expresión no existe en el idioma luso y, lo que es peor, equivale a un error gramatical, como lo es en español el alarmante “más mejor” o el lamentable “haiga”. Si lo que deseas expresar es un comparativo de tamaño deberías decir “maior que” o “menor que”. Y si deseas comparar edades “mais velho” o “mais novo”.

2.  Se barre la basura con la “vassoura”

Lo que seguro te sorprenderá es el uso de la palabra “vassoura” para designar escoba. “Escova”, por el contrario, es cepillo (de dientes o de cabello). Así que si por ahí quieres dártela de voluntarioso en alguna casa que te acoja, usa la “vassoura” para barrer la basura (que en portugués se dice “lixo”).

3.  ¿La comida está “exquisita”?

¿Te invitaron a un almuerzo, una cena o a un restaurante típico o una casa? Por ninguna razón digas, al final, que la comida estuvo “exquisita”, pues sonará al portugués “esquisita” que se refiere a todo lo raro, extraño y, por ende, desagradable. Toma cuidado si no quieres hacer una descortesía.

4.  “Bota camisinha”

Sin ánimo de exotizar ni erotizar tu viaje a Brasil, es necesario que sepas que si vas solo o con amigos y quieres perderte en la lujuria carnavalesca que, de seguro, te anima más que el fútbol, consideres que si tu compañera o compañero sexual te dice “bota camisinha” no te está pidiendo que te quites la camisa, sino que te pongas el condón. Papelones en el sexo no paga. “Botar” significa colocar y “camisinha” es el nombre común que recibe el preservativo. Recuerda que ya no estamos en épocas de “Me resfrié en Brasil”.

5.  A la hora de la “torcida”

Si has pensado ver un partido de fútbol es probable que ya sepas a qué equipo vas a alentar. Si alguien te pregunta “por quem você torce?” no te están diciendo que te vas a torcer algo en alguna pelea callejera. Por el contrario, te están preguntando en qué “torcida” (barra) estarás o de qué equipo serás hincha.

6.  Cuando pidas una “Pinga”

Pídela sin miedo, pues en Brasil (afortunadamente) no significa lo mismo que en Perú, pues se refiere a cualquier aguardiente o la unidad de medida equivalente a “gota” que quieras dosificar, en el caso de líquidos. No tiene aumentativo ni diminutivo, pues en Brasil la “pinga” (sí, la gota) es tamaño estándar.

7.  ¿Quieres agüita de coco o de “cocô”?

Si ya tienes un curso de portugués básico en la cabeza con certeza sabes usar algunos acentos, como el “circunflexo” (^), pero cuidado con eso, un acento (en portugués hay 7 acentos diferentes) puede cambiar totalmente el sentido a una palabra ¿Quieres agua de coco helado? No te afanes en pedirlo como “cocô” porque estarías pidiendo excremento en vez del refrescante fruto. Eso no provocará risa, sino asco.

8.  A la hora de beber

Si vas a celebrar el triunfo de tu equipo y te irás de farra ten en cuenta que los recipientes de las bebidas no se llaman igual en portugués que en español. Si quieres una copa de vino tendrás que pedir una “taça de vinho”, si quieres un vaso de whisky pídelo como un “copo de uisque”, “vaso” en portugués es maceta. Claro que, después de beber lo que beberás, mandarás tus intentos de “falar” portugués al tacho.

9.  ¿Quieres transar?

Si te quedaste misio y quieres, como buen peruano, (re) vender tus entradas o tus polos de Gamarra (cuyo algodón es mejor que el brasileño) evita usar términos comerciales como “transar”, pues en portugués significa “tener sexo”. Toma tus precauciones si es que quieres usarlo a propósito.

10.  Cuidado al mostrar tu “peru”

Sabemos de tu orgullo nacional cuando viajas al extranjero. Pero, infelizmente, debes saber que “peru” (sin tilde) significa simplemente “pavo”. Sí, así como el ave que es parte del festín navideño. Ahora bien, si lo que quieres es hablar del glorioso país de los incas y quieres dártela de brichero en tierras brasileñas debes saber que si invitas a alguien a conocer nuestro país, diciendo “ven conmigo que te muestro mi Perú”, le estarás proponiendo mostrarle nada menos que tu miembro viril. Ten cuidado de proponérselo a quien tenga novio y, peor aun, en voz alta.

Brasil es un país fascinante en la mistura de sus diferentes culturas, producto de siglos de migración e confluencias. Si además quieres conocer cómo un extranjero se adapta a la sociedad brasileña, presta atención a lo que un escritor francés describió sobre las curiosidades brasileñas, en función a los estereotipos de nuestro gran vecino del Este.

Por lo demás, no olvides estos brevísimos consejos de "portugués para dummies" y disfruta el Brasil sin barreras o roches idiomáticos.